Corriendo volví a entrar en casa. Di un beso a mi hermano Jack
que salía del baño y entré yo. Me quité la ropa y me sumergí en la bañera. Observaba
todo el baño desde allí tumbada. Me gustaba mucho el sencillo lavabo de madera
con margaritas a juego con la bañera. Las paredes eran simples maderas, como en
toda la casa. Salí de la bañera, ya arrugada por el tiempo que había pasado
dentro, y me fui a arreglarme. Mi habitación era pequeña y tenía dos camas
bastante juntas, la de mi madre y la mía. Sobre la colcha marrón caqui de mi
cama se encontraba un alegre vestido rosa claro con unas cuñas de flores del
mismo tono. Mi madre me recogió el pelo por los laterales y me lo enlazó atrás
con un lazo. Cuando todos estuvimos preparados nos sentamos en las sillas
viejas que, junto con la mesa, ocupaban el pequeño comedor contiguo a la
cocina. Todos nos mirábamos, silentes, no sabíamos que decirnos ni que hacer. Sonó
la campana que indicaba la hora de reunión ante el Edificio de Justicia para la
cosecha. Alcé la cabeza y miré a Will aterrorizada. Su nombre entraría 26 veces
en la urna ese año, y el mío 3. La suerte no está siempre de todas las partes.
Me levanté rápidamente de mi silla y di un gran abrazo a todos, prolongando un
poco más a mi hermano, podría ser el último que le diera. Salimos de casa y nos
dirigimos a la plaza. Por el camino cada uno fue encontrándose con los vecinos
y amigos que vivían cerca a nosotros, todos menos yo. Mis únicos amigos vivían
en la mejor casa del distrito , exceptuando la Aldea de los vencedores. Mis
amigos eran los hijos del alcalde.
Casi no me di cuenta de que habíamos llegado a la plaza. Nos
acercamos para hacer el habitual procedimiento de la sangre y luego nos
colocamos divididos por chicos y chicas. Busqué a Sofía y la hallé en una de
las primeras filas. Me acerqué con una leve sonrisa y la cogí muy fuerte de la
mano. Vimos como Melanie Correine se colocaba con sus excelentes modales del
capitolio y daba su aburrido discurso:
-Bienvenidos a todos a los vigésimoquintos juegos del
hambre. Como por todos es conocido, este año se cumplen 25 años desde los
primeros juegos y este es el primer Vasallaje de los veinticinco –Carraspeó un
poco y continuó.- El presidente Snow quiso que estos juegos fueran especiales y
la sorpresa debía ser guardada hasta este momento. Se ha decidido que todos
ustedes deberán votar a un chico y a una chica de vuestro distrito. El niño y
la niña más votados, serán los enviados a los juegos. Esto es para recordaros
que sois vosotros mismos los que habéis creado estos juegos cuando os rebelasteis
.Dicho esto, debéis rellenar las papeletas que los agentes de la paz os están
entregando e introducirlas en las urnas –femenina y masculina.- correspondiente.
Toda la plaza estaba muda y paralizada por el miedo. ¿Nos
iban de verdad a condenar nuestros amigos y familiares a morir? Yo estaba
segura de que mandarían a algunos de los profesionales, de los que se entrenan
para ir a los juegos. Mi familia no era de esos. Rellenamos los papeles. Los
metimos en las urnas. Cada uno volvimos a nuestros lugares. Los agentes de la
paz contabilizaron los votos. Fueron unos momentos de inquietud y miedo. ¿Quién
habría salido elegido? Tal vez fuera Max, uno de los que más duro entrenaba y
más sed de sangre tenía. ¿De chica? Sinceramente no tenía ni la más remota idea,
pero estaba tranquila por Sofía, la hija del alcalde no saldría elegida jamás. Cuando
los agentes hubieron terminado, introdujeron los nombres vencedor en la urnas. Melanie
se acercó a la urna de las chicas.
-Empezaremos por las damas. –Se aclaró la voz, cogió el
papel y lo desdobló con cuidado y no tardo mucho, pero a todos nos pareció una
eternidad. Hizo una mueca de satisfacción y se acercó al micrófono. ¿Quién es? ¿Qué
nombre hay puesto en esa papeleta? Pensaba yo. Mis dudas se disiparon en cuanto
leyó alto y claro.- Isabella Norwalk.
Alcé la cabeza –Que ni sabía que la había agachado.- Solté
la mano de Sofía y antes de que mis lágrimas empezaran a caer por mi mejilla,
me fui hacia el escenario. Tenía mucho miedo. Y no dejaba de preguntarme: ¿Por
qué? ¿Por qué me han elegido a mí? Nadie de este distrito me aprecia, o al
menos, no aprecia mi vida.
Me encanta!
ResponderEliminarMuchas gracias :D (L)
EliminarHola!
ResponderEliminarMe encanta como estás empezando la historia, escribes genial. Yo también tengo un blog, sobre la vida de Mags y justo ahora también estoy en el primer vasallage de los 25, pero como mentora, claro!
Te dejo el link por si te interesa ver otro punto de vista: http://drewintheskystories.blogspot.com.es/
Espero que te pases si puedes, a ver si hay suerte y te gusta tanto como a mí el tuyo.
Petons de maduixa!
Muchísimas gracias de verdad :D Me alegro de que te haya gustado!!
ResponderEliminarAhora mismo me paso a ver el tuyo,que seguro que es igual o más genial incluso!
Te voy a afiliar a mi página :)
Un besazo enorme!!